Un día como hoy, 12 de marzo fallecía a los 68 años San Luis Orione. “No es entre palmeras donde deseo vivir y morir, sino entre los pobres, que son Jesucristo”.
Don Orione, como popularmente se le conoce, nació en Italia en 1872. En su adolescencia fue alumno de San Juan Bosco en el Oratorio de Valdocco de Turín. “Nosotros siempre seremos amigos”, le dijo Don Bosco al joven. Más adelante ingresó al seminario de Tortona y abrió el primer oratorio para cuidar la educación cristiana de los jóvenes. Luego, con 21 años, abrió un colegio para chicos pobres en el barrio San Bernardino.
En 1895 fue ordenado sacerdote y celebró su primera Misa rodeado de sus muchachos. Con el tiempo abrió nuevas casas en diversas partes de Italia. Poco a poco se le unieron clérigos y sacerdotes. Se dedicó a la enseñanza de los jóvenes, la predicación, visitar a los pobres y los enfermos. En 1903, el Obispo de Tortona reconoció canónicamente a los Hijos de la Divina Providencia (sacerdotes, hermanos coadjutores y ermitaños), la congregación masculina de la Pequeña Obra de la Divina Providencia, dedicada a colaborar para llevar a los pequeños, pobres y el pueblo a la Iglesia y al Papa, mediante las obras de caridad.
Trabajó activamente en la libertad, la unidad de la Iglesia y la cristianización de los trabajadores. Socorrió heroicamente a los damnificados del terremoto de 1908, en el que murieron 90 mil personas. Fundó la Congregación de las Pequeñas Hermanas Misioneras de la Caridad, las Hermanas Adoratrices Sacramentinas invidentes y posteriormente a las Contemplativas de Jesús Crucificado.
Organizó a los seglares en Asociaciones de Damas de la Divina Providencia, los ex alumnos y los Amigos. Posteriormente tomó cuerpo el Instituto Secular Orionino y el Movimiento laical orionino.
Al acabar la primera Guerra Mundial, creció el número de escuelas, colegios y obras caritativas. Don Orione creó los “Pequeños Cottolengos” en los que atendía a los abandonados de las grandes ciudades. Envió varias expediciones misioneras a diversas partes del mundo, viajando incluso él mismo a países de América latina como Argentina, Brasil, Uruguay y Chile. Gozó de la estima de los Papas San Pío X, Benedicto XV, Pío XI y Pío XII, confiándosele resolver problemas dentro y fuera de la iglesia.
Construyó los santuarios de la Virgen de la Guardia en Tortona y de la Virgen de Caravaggio en Funo. Rodeado del cariño de sus religiosos, partió a la Casa del Padre el 12 de marzo de 1940 y suspirando: “¡Jesús!, ¡Jesús! Voy…”
HIMNO A DON ORIONE
Al Apóstol de Dios Don Orione
nuestro padre y Santo Fundador
elevemos un férvido canto
florecido en su gloria y honor.
Padre amante de todos los pobres
los niños y la juventud
En quien viste, humilde y piadoso
la presencia del mismo Jesús
Que se cumpla tu anhelo supremo
que en los pueblos triunfe la Cruz
¡Oh milagro de Fe y entereza!
¡Oh prodigio del místico amor!
Por el Papa, por Dios y la Virgen,
cuan heroico fue tu gran corazón
Fiel obrero de la Providencia
que supiste las penas calmar
y las almas llevaste a Cristo
ofreciendo a los pobres el pan
que se cumpla tu anhelo supremo
¡Caridad! ¡Caridad! ¡Caridad!
No hay comentarios:
Publicar un comentario