Páginas

martes, 13 de julio de 2021

Comenzó el triduo de preparación a la fiesta de la Coronación. Homilía del padre Feli de los Mozos

Este 13 de julio dio inicio el triduo de preparación al 121º aniversario de la Coronación Pontificia de la imagen original de Nuestra Señora de Itatí.


En la primera jornada se rezó por los líderes políticos, y presidió la santa Misa el padre Feliciano de los Mozos y concelebró el padre Derlis Sosa.

Homilía

Estamos celebrando el primer día del triduo de preparación al 121° Aniversario de la Coronación de la Imagen de la Virgen de Itatí. Seguimos con la plandemia, y esto nos obliga a celebrarlo en circunstancias especiales.

La palabra de Dios de hoy nos dice que no hay pecado, por muy grave que sea, del que no pueda haber arrepentimiento, conversión y perdón. Lo peor es no querer arrepentirse, no querer convertirse, no querer cambiar, no querer crecer.

En la secuencia del Libro del Éxodo de hoy, Moisés, el gran libertador de Israel, comete un pecado mortal, nada menos que un homicidio; mata a un egipcio que a su vez estaba maltratando a un hebreo. Sus ansias de justicia, en el ambiente de opresión en que vivía, no han madurado y no comprende que la liberación no puede conllevar la muerte, pues la violencia sólo genera más violencia. Temeroso de ser descubierto huirá al desierto de Madián donde tendrá ocasión de orientarse, meditar y arrepentirse.

Que lindo poder experimentar como sacerdote que Itatí es ese “desierto”, donde tantas personas encuentran la ocasión de orientarse, meditar y arrepentirse. Y cuando es así, Dios las bendice.

Por eso Jesús hoy alza su voz contra las ciudades que no se han convertido, pues a pesar de haber recibido profetas y mensajeros que les han animado a ello, todo ha sido inútil. Jesús no pone el acento en el pecado, sino en los duros de corazón, en los que no quieren escuchar ni convertirse.

Esto me lleva a pensar en mí y en Itatí. ¿Cuántas oportunidades, llamadas al crecimiento, al cambio, a la conversión he recibido de Dios en mi vida? ¿Las escucho? ¿Dejo que el Señor tenga una palabra que decir sobre mi vida? ¿O soy como las ciudades de Corozaín, Betsaida o Cafarnaún, más duro que una piedra?

ITATÍ e Itateños: ¿Cuántas llamadas han recibido de Dios? Que no tenga que decir el Señor: ay de ti ITATÍ, porque si otros pueblos tuvieran la dicha de custodiar la imagen de nuestra Madre del cielo, ya se habrían convertido.

Hoy, rezamos por todos los líderes políticos especialmente los de nuestro pueblo y departamento.

Que lindo cuando los líderes políticos son conscientes que su misión no pueden ejercerla según su criterio, sino que su misión está delegada por Dios, para buscar el bien común (y no el propio), teniendo en cuenta la promoción y el bien de los más pobres y desfavorecidos.

No estoy inventando nada, ya que la carta a los romanos, 13,1 dice: “Sométase toda persona a las autoridades que gobiernan. Porque no hay autoridad sino de Dios, y las que existen, por Dios son constituidas”. Luego, ustedes, cuando ejercen el poder, en el gobierno o en la oposición, ya sea nacional, provincial o local, no debieran olvidar jamás que están cumpliendo una misión delegada por Dios mismo.

Cuando un gobernante olvida esto, el pueblo queda exento de someterse a su autoridad. Y en ese caso quedan dos opciones: o bien, convocar nuevas elecciones, que es la forma democrática que el pueblo tiene de poder seguir eligiendo sus gobernantes; o bien la rebelión.

Todos nos quejamos de las dictaduras, porque entendemos que nadie puede ejercer el poder sin buscar el bien común, respetando la libertad individual de las personas. Y todos somos sujetos de derechos y deberes que debemos ejercer y cumplir. Vivimos en sociedad, y todos somos co-responsables del bien común.

Aprovecho desde aquí para manifestar mi apoyo y mi oración por el pueblo cubano en su lucha por la libertad. Y a quien diga que en Cuba hay libertad, le invito a dejarse de demagogias y a irse a vivir allí.

Pero como no quiero convertir esta homilía en un mitin político, sino en una reflexión para los líderes políticos, en concreto los de nuestro pueblo. Por eso voy a hablarles “con el corazón en la mano”, como Itateño que me siento. Dentro de dos meses, se cumplirán siete años que comparto mi vida con ustedes.

Itatí es el pueblo de la Virgen. Las personas que llegan hasta Itatí, más del 99% vienen por su amor a la Virgen. De esto no nos quepa la menor duda, y todos lo sabemos. Por ello me parece importante dejarles estas 10 recomendaciones:

1.- La Basílica no es, ni puede ser, un ente aparte y ajeno a las decisiones que se toman desde la Municipalidad. La colaboración tiene que ser mutua y el diálogo constante.

2.- Ustedes están al frente del pueblo para servir, y ésto deben hacerlo siempre tomando las mejores decisiones.

3.- En su función de políticos, busquen siempre el bien de todos por encima de intereses partidistas o de algunas personas.

4.- Sería lindo que Itatí no solamente sea el pueblo de la virgen, sino un pueblo modelo, donde pudieran copiar todos los que se acercan hasta aquí.

5.- Cuiden el orden, la limpieza, y el respeto entre los ciudadanos y con los peregrinos. No podemos exigir a los de afuera lo que no hacemos nosotros.

6.- Fomenten todo aquello que promueva el trabajo, el empleo, y la promoción del ser humano. Eviten fomentar la dependencia, la vagancia y el clientelismo.

7.- Cumplan y hagan cumplir las normas de convivencia. Para algo son las autoridades del pueblo.

8.- Los partidos de la oposición, colaboren y recuerden constantemente a quienes gobiernan los compromisos asumidos, para que los cumplan.

9.- Prepárense adecuadamente para la función que van a cumplir, pues la responsabilidad es mucha y no se puede hacer de cualquier manera. Para ello rodéense de personas capacitadas, evitando los amiguismos, y convertir las instituciones en un club de familia.

10.- Si no tienen espíritu de servicio, dejen la política. Y si lo tienen, cuenten siempre con Dios para tomar sus decisiones. Si así es, que Dios los bendiga y la tierna Madre de Itatí los proteja siempre. Así sea.

No hay comentarios:

Publicar un comentario