Una verdadera multitud se congregó en Itatí durante estos dos días de festejos, que culminaron en horas de la noche con la misa y la procesión de antorchas.
La solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, es sin dudas una de las celebraciones que congrega en Itatí a miles de peregrinos y cada año son más los que llegan de distintos lugares de la región, especialmente de la provincia de Misiones.
A las 19 se celebró la última misa del día, presidida por el rector del santuario, padre David Penzotti, en donde los niños hicieron su comunión solemne.
Luego tuvo lugar la procesión de antorchas, de la que participaron las asociaciones parroquiales con sus estandartes, monaguillos, niños de primera comunión, ministros extraordinarios de la Comunión, el subjefe de la Comisaría de Itatí y personal de esa institución, el Intendente interino Salvador Lugo y el padre Penzotti.
Los custodios portaron a la imagen peregrina de Nuestra Señora de Itatí hermosamente adornada con flores e iluminada para esta solemnidad.
La singular belleza de la imagen de María de Itatí acaparó la atención de los cientos de fieles quienes con los celulares captaron este momento en una de las procesiones más importantes que se realizan durante el año.
Luego de rodear la plaza, en el atrio del santuario se rezó la oración a la Virgen de Itatí y antes de impartir la bendición, el padre rector agradeció al Intendente Salvador Lugo y a los efectivos policiales que acompañaron la procesión, a los custodios y a los que colaboraron para esta fiesta.
Además manifestó “vamos a aprovechar para rezar en este tiempo de cambio de autoridades en nuestro pueblo, agradecerle a don Salvador que le tocó asumir la guía de nuestra comunidad en un momento difícil. También rezamos por Germán Fernández que va a asumir como intendente de nuestro pueblo el lunes a las 20 y por Mirno Bizarro que asumirá como viceintendente, a todos ellos los encomendamos a la Virgen”.
Después de rezar el Avemaría impartió la bendición por intercesión de la santísima Virgen María. Para finalizar le cantaron a Nuestra Señora, “los himnos más dulces que el pecho atesora”, mientras la saludaban con los farolitos en alto.
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