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sábado, 12 de noviembre de 2011

LA COCINA A LEÑA EN ITATÍ

Desde hace quince años, unas veinte familias campesinas de las zonas de Yacareí, Ramada Paso, Guayú y Palmira, en el departamento Itatí, vienen trabajando en la producción de diferentes alimentos como dulces, escabeches, panificados cocinados a leña.


Organizados en ferias francas ofrecen sus productos en forma semanal en la localidad de Itatí, pero también a través de diferentes puestos de venta. 

“Nuestra costumbre es cocinar a leña”- explica Gustavo Falcón, del paraje Yacareí - “a muchos de nuestros clientes les gusta el alimento con gustito a humo, pero a otros no. Por eso comenzamos a buscar la forma de ir mejorando nuestras cocinas, buscando mayor higiene y evitando el contacto de los alimentos con el humo o el ollín”. 

Compartiendo experiencias y saberes, junto a instituciones como INCUPO y la Subsecretaría de Agricultura Familiar, las familias campesinas fueron buscando y probando diferentes alternativas de cocinas. Contaron también con el aporte del capacitador Eric Barney, del Grupo de Energías renovables de Misiones. 

“Poniendo en práctica diferentes modelos, cocinando y probando juntos le fuimos encontrando la vuelta”-sigue explicando Gustavo- “logramos poner en funcionamiento una cocina donde el humo y la manipulación de la leña quedan fuera de la casa. En la parte de adentro queda la planchuela de hierro fundido donde calentamos hasta tres ollas por vez”. 

Sobre las ventajas de esta cocina mejorada “Teia” González, vecina del lugar explicó: “La preparación de los alimentos es mucho más higiénica ya que no hay contacto con humo ni ollín. Todo lo que es la carga de leña, la chimenea y la limpieza del horno queda afuera de la casa. La cocción es pareja. 

Esto mejora muchísimo el aspecto y el sabor del producto” “También se ahorra energía”-agrega Gustavo- “Unas vez que la planchuela de hierro se calienta, podés calentar tres ollas al mismo tiempo. En 20 minutos se logra hacer hervir una olla de 50 litros. La leña que ocupamos sale del raleo de los árboles de la zona, es el excedente que se usa. Por eso le decimos cocina económica.” 

Al hablar de costos y construcción de las cocinas, Falcón explicó que “la construcción es muy sencilla. Sólo se utilizan unos 500 ladrillos y barro para el revoque. El mayor costo lo tiene la planchuela de hierro fundido que ronda los 900$. Para esto sí tuvimos que organizarnos y gestionar proyectos de ayuda a la Subsecretaría y a INCUPO. También para terminar las cocinas y adecuarla como si fuera una sala de elaboración tuvimos que gestionar un crédito que estamos cubriendo entre todas las familias.” 

Mediante su organización y perseverancia las familias campesinas ya lograron la construcción de 16 “cocinas económicas” y la instalación de diferentes tipos de hornos de uso familiar. Un paso más en el objetivo de mejorar la producción de alimentos sanos y naturales, preocupación permanente de los feriantes correntinos y de la región que se fortalecen día a día como abastecedores de alimentos de los pueblos y ciudades. 

Recuadrito aparte 
La Red de Energías renovables La experiencia realizada por los campesinos correntinos está acompañada por la “Red de Energías Renovables” integrada por INCUPO, INTA, INTI y la Subsecretaría de Agricultura Familiar de la Nación. 

Tiene como objetivo promover para el sector rural el uso de energías renovables, es decir que no dependan de combustibles derivados del petróleo, como naftas y gasoil, ni tampoco del uso de gas. Dentro de estas energías está el uso de leña que se genera como excedente en el manejo del monte.




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