Del 30 de noviembre al 2 de diciembre se realizó la 13ª Peregrinación a Caacupé integrada por un contingente de peregrinos de Itatí, San Luis del Palmar y de Capital acompañados por el sacerdote Itateño Victor Aranda.
La imagen peregrina de la Virgen de Itatí, partió desde su santuario hacia Caacupé, con un nutrido grupo de peregrinos que como hace 13 años acompañan a la Patrona de Corrientes y participan del novenario en honor a la Patrona del Paraguay.
Este año en coincidencia con la peregrinación juvenil de las arquidiócesis de Paraguay, los correntinos, participaron de la santa misa el sábado 1 de diciembre a las 19, que fue presidida por monseñor Ricardo Valenzuela, obispo de la diócesis de Villa Rica, y concelebrada por monseñor Claudio Giménez, obispo de Caacupé, y monseñor González, obispo de la diócesis de María Auxiliadora, Paraguay.
Previo a la misa la Imagen de la Virgen de Itatí, hizo su ingreso acompañada por los peregrinos llegados de Argentina, cuando se desató una fuerte lluvia que emocionó a los miles de peregrinos congregados en la plaza, frente al santuario. Este signo en el Año de la Fe que estamos transitando, fue tomado como una especial bendición de la Virgen para los hermanos paraguayos que estaban sufriendo las inundaciones como consecuencia de las condiciones climáticas.
Las palabras de bienvenidas estuvieron a cargo de monseñor Claudio Giménez.
Durante la celebración los jóvenes realizaron numerosos gestos y presentaron signos alegóricos al Año de la Fe, en conmemoración de los 50 años del Concilio Vaticano II, y los 25 de la Catequesis.
Además de la Imagen de María de Itatí y María de Caacupé, tuvo su lugar destacado la Cruz Mundial de los Jóvenes, traída especialmente para la novena desde Brasil, ya que el próximo año el Encuentro Mundial de la Juventud se realizará en Río de Janeiro. Esta cruz fue bendecida por el Papa Juan Pablo II y visita todos los países donde se realizará el Encuentro Mundial de jóvenes.
En su homilía monseñor Valenzuela se refirió a las peregrinaciones, y especialmente a los santuarios, casa de encuentro de Dios con el hombre, en su papel de peregrino, y dio algunas recomendaciones que puede ayudar a todo peregrino a profundizar más su fe en Cristo, pero no sólo a los laicos, sino también a los sacerdotes, diáconos, religiosos y religiosas.
La celebración fue amenizada por el coro del santuario que dio realce a la celebración eucarística, ya que llamaba al recogimiento y oración.
El domingo 2 participaron de la misa central, que fue transmitida por el SNT, canal de televisión del Paraguay, en donde la Virgen peregrina de Itatí fue aclamada por los más de diez mil peregrinos que participaron de la celebración eucarística dominical. Después la Imagen de la Virgen fue llevada a la localidad de Mariano Roque Alanzo para visitar la casa de la Obra Don Orione, capilla y Pequeño Cottolengo que hay en el lugar. Luego de eso se emprendió el regreso hacia Corrientes, arribando a la basílica de Itatí alrededor de las 22.
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