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lunes, 29 de abril de 2013

PROFUNDO PESAR POR LA MUERTE DE DIEGO

En las primeras horas del 29 de abril falleció el joven Diego Blanco Del Bianco, de 16 años de edad, quien era alumno de la Escuela Normal de Itatí. 


Muestras de profundo pesar quedaron de manifiesto a través de la redes sociales, principalmente facebook en el perfil de Diegho Blanco, donde tanto compañeros, amigos y conocidos dejaron sus condolencias a la familia. 

Debido a la enfermedad que lo aquejaba, la leucemia, se habían realizado campañas de donación de sangre, con la activa participación de alumnos y docentes de la Escuela Normal como también de la comunidad itateña, apoyando a la familia de Diego. Además se celebró una misa pidiendo por su salud y se realizaron cadenas de oración. 

En el velatorio, a las 15,20 el padre Mettini realizó un responso con la asistencia de familiares y la comunidad educativa de la Escuela Normal. 

El 30 de abril a las 8,30 se celebrará la misa de cuerpo presente en la Basílica de Nuestra Señora de Itatí y luego sus restos descansarán en el cementerio “San Francisco de Asís”. 

ORACIÓN
Señor Jesús, 
que eres Dios y conoces todas las cosas, 
que eres hombre y has vivido tu propia muerte en la cruz; 
tú que lloraste la ausencia de un amigo, 
a quien amabas entrañablemente, 
comprendes hoy el dolor de nuestra comunidad Itateña, 
el dolor de cada uno de nosotros, familiares, amigos, 
conocidos, compañeros y profesores, 
ante la muerte de Diego. 

Nos conforta tu presencia y tu testimonio 
y nos ilumina tu palabra, que es palabra de vida, 
de esperanza cierta en la resurrección. 
Tú eres la resurrección y la vida: 
el que cree en Ti, aunque haya muerto vivirá. 

Nuestro hermano Diego creyó en Ti 
y sabemos que cumplirás en él tu promesa, 
no por lo que él hizo sino por lo que Tú eres, 
no por sus méritos sino por tu misericordia. 
También nosotros creemos en Ti, Señor. 

Tu Pascua nos permite pregustar 
el gozo de nuestra propia pascua. 
Haz que mientras permanezcamos en este mundo, 
sepamos ser como el grano de trigo 
que cae en tierra y muere para dar fruto abundante: 
el fruto de la vida, que eres Tú, Cristo resucitado, 
profecía y testimonio del hombre nuevo. 

Te lo pedimos confiadamente 
por intercesión de María de Itatí, Madre nuestra, Amén. 

DIEGO BLANCO DEL BIANCO 
Q.E.P.D.

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