Hace 50 años, el Ministerio de Salud de la Nación instituyó el 21 de noviembre como el Día de la Enfermería, en coincidencia con la festividad de Nuestra Señora de los Remedios, considerada patrona de la actividad. Como quienes realizaban esta práctica eran, en su mayoría mujeres, nació como Día de la Enfermera. Por este motivo se celebró una Misa en el salón de usos múltiples del Hospital de Itatí.
La celebración religiosa de acción de gracias estuvo presidida por el padre Pánfilo Ortega Ríos fdp, y participaron personal en actividad y jubilados de enfermería, médicos, personal de maestranza, y vecinos del nosocomio. Luego se realizó un brindis con los presentes.
En su homilía, el padre Ortega hizo referencia a la vocación de servicio de estos servidores de la salud, recordando que el Evangelio está escrito que ningún servicio en bien de los enfermos o minusválidos dejará de ser recompensado y también recordó lo dicho de San Luis Orione, “en el más miserable de los hombres brilla la imagen de Dios”.
En el momento de las ofrendas, los enfermeros en actividad y jubilados realizaron la procesión donde presentaron cruces simbolizando a los niños, hombres y mujeres que acuden al hospital buscando el don preciado de la salud, y que a causa de la enfermedad se encuentran en el momento de cruz, y para recordar que en estas personas esta la imagen de Jesús.
Antes de finalizar el padre Pánfilo agradeció en nombre de la comunidad de Itatí a los enfermeras y enfermeros, camilleros, médicos personal de servicios, que sirven en este nosocomio por las atenciones brindadas ya que en momentos de enfermedad, él también fue asistido y cuidado, y que gracias a esto pudo restablecer su salud.
Finalmente se rezó la Oración de la Enfermera, momento donde el personal activo y jubilado pudo renovar su consagración a Dios, por intercesión de la Virgen de Itatí y Nuestra Señora de los Remedios.
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