por Germán Díaz
Religioso Salesiano. Lic. en Comunicación Social
El “Chamamé” es quizás, la música y la danza típica de mayor antigüedad, en nuestro país. Pocho Roch(1), un emblemático músico y cantante correntino, sostiene que el antecedente del chamamé consiste en que los guaraníes antiguamente se reunían a cantar y bailar mientras llovía. Hacían rondas, cantaban y celebraban la alegría de la reunión. Actualmente el chamamé cuenta con muchos adeptos y sin lugar a dudas expresa los sentimientos mas puros de un pueblo que bebe de la fuente de sus tradiciones para encontrar el rumbo de la historia.
La cultura guaraní esta vinculada a la experiencia religiosa de los antepasados y el magnifico emprendimiento evangelizador de los jesuitas. La presencia de la Virgen de Itatí en el bagaje cultural correntino expresa de manera sensible la misión cristiana, el arte nativo, la cultura criolla y las raíces profundas de un pueblo. La bella imagen de la Virgen está tallada en timbó y el rostro en nogal; con el tiempo y la devoción popular se fueron agregando vestidos, capas, corona y así tan bella se encuentra en la actualidad. El nombre de la Pura y Limpia Concepción de Itatí viene de la lengua guaraní "ita", roca, y "tí ", blanca, o sea, “piedra blanca”, ya que existían yacimientos de cal junto al arroyo Caleria. Cuatro siglos pasaron de que la imagen de Itatí fuera traída de la reducción de Ciudad Real a Guayrá, debido a los constantes ataques. En ese lugar levantaron un oratorio y colocaron a la imagen de la Virgen, pero un ataque de aborígenes hostiles destruyó el lugar y de la imagen ya no se supo nada.
Según la tradición la imagen habría sido encontrada en el curso del alto Paraná por un grupo de indios que vieron a la Virgen Inmaculada sobre una piedra rodeada de una luz muy brillante y acompañada de una música sobrenatural. El religioso encargado de la misión ordenó el inmediato traslado de la figura a la reducción, pero la imagen volvió a desaparecer en dos ocasiones, retornando a su lugar cerca del río. El tiempo atrajo la devoción del pueblo y el tributo de un majestuoso santuario y basílica motivado por el entonces obispo Monseñor Francisco Vicentín.
La Virgen de Itatí expresa ciertamente la síntesis de la Identidad guaraní. Así lo manifestó recientemente en un medio local un funcionario de primera línea del Gobierno de Corrientes. No es para menos, la imagen peregrina de la Madre del Nordeste se llegó desde Itatí a la ciudad capitalina de Corrientes, precisamente el domingo 15 de enero de 2012 y la acompañaron en procesión náutica mas de 30 embarcaciones que culminó en Punta Arazatì. La Bella Virgencita fue acompañada por los fieles devotos hasta la Parroquia Nuestra Sra. del Perpetuo Socorro y luego de la Eucaristía ingreso con los mejores aplausos y gritos de sapucay al Anfiteatro “Mario del Transito Cocomarola” en la segunda noche de la edición 22 del Festival Nacional del Chamamé. Cada noche de las nueve que tiene el festival estuvo presente en el costado derecho del escenario la imagen de la Virgencita que era saludada e invocada por sus devotos en plena fiesta, canto y baile. Cuando muchas personas en grandes ciudades piensan en sacar a las imágenes religiosas de todas las instituciones publicas, el pueblo de Corrientes venera a su Madre delante de todas las luces y cámaras y con todos los honores.
Un juglar de la Virgencita de Itatí que desborda de amor en sus letras y músicas es Pocho Roch. El Chamamé de este artista expresa con hondísimo sentimiento algunas imágenes de la venerada Madre de Cristo como por ejemplo: “Peregrinos de la Virgen Correntina cuando el sol se despereza en la lomada San Luisito anda en el hombro de la gente caravana de carretas... toldo y llantas... La Yasí (luna) acollara sombras del estero y un rosario de fogones florecidos hay un canto... una oración... después silencio hasta que nazca más allá la madrugada. Mediodía en el “Atajo” milagroso, una ermita y un torrente legendario, restan sólo seis kilómetros de huella para llegar con su esperanza a tu santuario. Hay revuelo de campanas en el pueblo y en la fe del peregrino no hay cansancio porque allí nomás… en su camarín está la Virgen Correntina de Itatí” También existe un chamamé llamado “Peregrino de la esperanza” de otros autores y otros mas sentidos que hasta con orgullo reflejan “Soy sancosmeño...cerquita de la Virgencita de Itatí” y la lista es larga. En el canto y en la prosa chamamecera también se integra un sacerdote conocido como Paí(2) Julián Zini de una gran sensibilidad poética.
Quizás no nos damos cuenta o no sabemos mucho lo que tenemos como pueblo pero en estos días donde a todo contestamos “OK” o pedimos disculpas con “sorry” y nos acostumbramos al mail, al face.. y al wi fi, puede ser el momento para volver a lo nuestro. Cuando perdemos la memoria es porque no sabemos donde estamos parados y quienes somos. Como dice esa hermosa canción: “Que lindo que es un pueblo (la gente) cuando tiene memoria y cuando vive cantando su fe”.
(1) Gonzalo del Corazón del Jesús Roch es un artista que nació en la ciudad de Itatí, provincia de Corrientes, un 15 de abril de 1939.
Su inclinación musical viene desde niño junto a su abuelo’ catalán’ que ejecutaba el piano y el órgano de la Basílica de Nuestra Señora de Itatí. Su nutrida producción musical cuenta con temas como “De allá ité”, “Corrientes soñadora”, entre otros...
(2) Paí: padre
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