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domingo, 31 de octubre de 2010

PARA LOS CRISTIANOS, LA MUERTE ESTÁ ILUMINADA POR LA FE

“En la fiesta de Todos los Santos, la Iglesia nos invita a mirar al cielo y contemplar la multitud de hombres y mujeres de todo pueblo y nación que están junto a Dios”, dice monseñor José Luis Mollaghan, arzobispo de Rosario, en un mensaje con motivo del día de Todos los Santos y de la conmemoración de todos los Fieles Difuntos, que se celebrarán los días 1 y 2 de noviembre, respectivamente.

Al recordar que el día de Todos los Santos es también la “Jornada para rezar por la santificación del pueblo argentino y la glorificación de los siervos de Dios”, el prelado subraya que “ellos le dan gloria y alabanza a Cristo, porque en esta vida lo siguieron y vivieron su mensaje de amor”.
Por otra parte, al referirse a la conmemoración de los difuntos, recomienda “visitar los cementerios y rezar por los difuntos. Así recordamos a nuestros seres queridos, sabiendo que ellos no están resignados al olvido o a morir para siempre”.
Sin embargo, aclara que “nuestra visita a los cementerios no es el recorrido por un museo o a una galería de arte” sino que “para los cristianos, la muerte está iluminada por la fe. En el cementerio podemos expresar con nuestro silencio y reconocimiento, el recuerdo a nuestros seres queridos y la oración. Allí reposan los restos de quienes compartieron con nosotros la vida, ellos esperan la Resurrección”.

Indulgencias
Del 1 al 8 de noviembre se puede alcanzar la indulgencia plenaria por las almas del purgatorio, visitando el cementerio y rezando por los difuntos, con la confesión y la comunión. También se podrá alcanzar la indulgencia plenaria por los difuntos visitando una iglesia y agregando la oración del Padre Nuestro y un Credo, y la oración por el Santo Padre.

Solemnidad de Todos los Santos
La Iglesia, que durante el año sólo pudo honrar determinadamente a algunos de sus hijos más preclaros, quiere recordar a todos los millones de justos, que fueron sencillos fieles en la tierra y ahora están en el cielo. Todos los santos se santificaron en las ocupaciones de su estado y en las circunstancias ordinarias de su vida. Entre ellos están muchos parientes, amigos y conocidos, a quienes van dirigidos los cultos de esa solemnidad.

Jornada por la santificación
El mismo día se celebra la Jornada Nacional instituida por la Conferencia Episcopal Argentina para orar “por la santificación del pueblo argentino y por la glorificación de sus Siervos de Dios”, es decir por todas las personas que en nuestro país están propuestas para la beatificación y canonización. El calendario litúrgico de la Argentina incluye un santo: san Héctor Valdivielso Sáez, mártir; hay también 9 beatos, 8 venerables y 30 siervos de Dios.

Conmemoración de todos los Fieles Difuntos
Según la doctrina católica, el que muere en gracia de Dios -es decir, sin pecado- pero no está todavía libre de las penas que merecieron sus culpas, no puede ir directamente al cielo, sino que va a un lugar de purificación que se llama Purgatorio. Los cristianos, de acuerdo con dicha doctrina, ayudan a los difuntos a reducir sus penas mediante la oración, los actos de caridad, las obras de misericordia y sobre todo la Santa Misa, con el propósito de aumentar la esperanza en la resurrección que, según el dogma católico, ocurrirá al fin de los tiempos.

Celebraciones en la Basílica
El lunes 1º se celebrarán Misas a las 8,30; 10; 17 y 19 hs. En tanto el que el martes 2, las Misas en el Santuario, serán a las 8,30; 10 y 19 hs. En el Cementerio habrá responsos desde las 7 a las 19, y a las 17 se oficiará una Misa.

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