LA HERMANA ERMITAÑA CUMPLE 25 AÑOS EN ITATÍ

En Itatí, a unos kilómetros del Santuario de la Virgen, una religiosa conocida como “la Ermitaña” trata de vivir adorando a Dios en silencio, soledad, realizando trabajos manuales y en oración.

“Yo voy a reducirla, la llevaré al desierto y hablaré a su Corazón.” (Os. 2,16). Estas son Palabras de Dios escritas en la Biblia. En la Iglesia siempre hubo monjes y monjas “llevados” por Dios “al desierto”, para vivir solo con Dios y para Dios.

Los Monjes Cartujos, en sus escritos dicen:
“Nuestra tarea es permanecer escondidos en el secreto del corazón del Señor.”
“Rendir un homenaje puro, en nombre de la humanidad a la trascendencia Divina.” Dios es digno de que se le ofrezca este sacrificio (no visitas) y esto ayudará más a los hombres que nuestras palabras.”
“Nosotros nos retiramos al desierto (lugar solitario) porque estamos enamorados de Dios”.

La Hermana María Teresa de la Trinidad (Teresa Klug), llegó a Itatí, tierra de la Virgen María, por designio de Dios, hace 25 años, un 22 de Mayo de 1985.

Ella, explicó en pocas palabras el por qué de vivir en Itatí. Llena de gozo respondió: ”yo quería vivir en el “desierto” cerca de un Santuario y en una zona pobre”.

La “Hermanita del monte” o “la Hermanita de Santa Rosa” (así llamada por los Itateños) quiere por este medio, y en esta ocasión tan importante para Ella; agradecer muy especialmente al pueblo de Itatí, por el apoyo, oración, ayuda y respeto por esta manera de vivir tan especial.