Desde la Basílica partió la procesión con la imagen peregrina de la Virgen de Itatí para pedir su intercesión ante la creciente del Paraná. Fue llevada hasta la costa del río en donde se realizó una rogativa.
A la salida del templo, el rector del santuario padre Roberto Simionato dijo: “que hermoso este gesto de sacar a la Virgen a la calle, de llevar a Mamá María a la costa del río, le queremos contar a la Virgen lo que nos está pasando”.
Y continúo, “miranos con ojos de misericordia hoy, acordate de nosotros, así como en los siglos pasados protegiste a este pueblo de tantos peligros, así como en el atajo pusiste tu mano y defendiste de la destrucción, de que fuera arrasado este pueblo, así hoy te pedimos que nos defiendas de este rio, tan manso y sereno cuando esta sereno, tan bravo y peligroso cuando se pone malo. Mira este río a cuya vera quisiste quedarte”.
La procesión prosiguió hasta la Prefectura Itatí en donde aguardaban el jefe, prefecto Rodolfo Daniel Kubiszyn, y personal de esa fuerza de seguridad, quienes ayudaron a portar la imagen hasta la esquina de la avenida Roque González de Santa Cruz y Castor de León, en donde colocaron a la Virgen mirando hacia el río y se realizó la rogativa.
También acompañaron la procesión el Intendente de Itatí Natividad Terán, la concejal Graciela González, miembros del gabinete municipal, de las áreas de Cultura y Deporte; los Bomberos Voluntarios de Itatí, la Policía de Corrientes, inspectores de tránsito municipal, residentes del Cottolengo y miembros de la comunidad.
Junto al río, el padre Feliciano de los Mozos invocó a la Virgen por los inundados, “tú que eres la reina del Paraná, tú que eres también la patrona de Itatí, la patrona de Corrientes, haz que tus hijos no sigan sufriendo las inclemencias del mal, haz que seamos solidarios con ellos, que nos compadezcamos también de las necesidades que nos está creando la inundación, que les apoyemos con nuestra cercanía, con la apertura de nuestras casas y también ayudándoles en las necesidades de alimentos y ropa. Te pedimos que tú que supiste acoger a todos tus hijos a lo largo de tantos siglos, en este momento también nos concedas la gracia y el milagro de tu protección. Sabemos que siempre nos amparas por eso acudimos a tí con fe para que una vez más nos concedas las gracias que necesitamos. Te pedimos que las aguas del río no sigan haciendo mal a nuestros hermanos. Y te pedimos que a través de tu hijo Jesús nos concedas que la gracias, que cada uno de nosotros en su corazón implora, sean pronto una realidad”.
Después honraron a la Virgen cantándole “los himnos más dulces que el pecho atesora” para luego regresar al santuario, en donde el padre Feliciano dijo: “esta ha sido una salida especial de la Virgen,. Ha sido un gesto muy lindo el que como itateños hayamos recurrido a nuestra Madre, pidiéndole en medio de nuestras necesidades. Ojala que en muy poquitos días tengamos que sacar de nuevo a la Virgen, diciéndole, gracias Madre por nunca nos fallas”.
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