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jueves, 4 de agosto de 2011

REFLEXIÓN POR EL DÍA DEL PÁRROCO

El párroco, un pastor que “congrega” y “conduce” a su pueblo 

El Santo Cura de Ars: San Juan María Vianney
El arzobispo de Santa Fe de la Vera Cruz, monseñor José María Arancedo, destacó que el hecho de ser “elegido”, la referencia a favor de los hermanos y el servicio a Dios, expresan el sentido vocacional de un sacerdote, al referirse al Día del Párroco que se celebra cada 4 de agosto, en coincidencia con la fiesta del Santo Cura de Ars. 

El prelado también citó el texto evangélico del Buen Pastor para hablar de la vida de un párroco. 

“En este pasaje es el mismo Jesucristo quien se presenta como el Buen Pastor. Esta imagen tiene, por ello, un valor paradigmático en la vida de todo párroco. Es cierto que frente a esta imagen todos quedamos empequeñecidos, pero en ella está nuestra verdad de pastores como un ideal al que debemos tender. Cuando pongo en posesión a un cura párroco casi siempre le digo que no tenemos que pensar tanto en qué tenemos que hacer, sólo debemos contemplar con un corazón abierto y generoso a Jesucristo, el Buen Pastor. Marcaría de este texto algunas notas que orientan su ministerio”, recordó. 

El arzobispo santafesino sostuvo que “el pastor conoce y es conocido por su rebaño; va adelante, es un referente; congrega y conduce a su pueblo; lo alimenta y cura sus heridas; busca a quien está alejado y, sobre todo, da su vida, la entrega, nadie se la quita. Ciertamente es una imagen que nos supera, pero qué alegría y qué responsabilidad sentirnos llamados a ser la presencia viva de Jesucristo, el Buen Pastor”. 

“El sacerdocio católico tiene en Jesucristo su razón de ser y su misión. Es más, debemos decir que el mismo Jesucristo quiso prolongar su presencia a través de un sacramento, el sacramento del Orden Sagrado. A esto es llamado el sacerdote. Sólo la referencia a Jesucristo explica su entrega total a la obra del Reino de Dios. El significado del sacramento que lo consagra y lo hace ‘alter Christus’ (otro Cristo), excluye toda forma de un ministerio ‘ad tempus’ (por un tiempo), o ser considerado como una función delegada por la comunidad”, destacó. 

Y agregó: “Su ser, su realidad ontológica, participa directamente de Jesucristo por mediación apostólica, es decir del apóstol, del obispo que lo ordena, en la comunión de la Iglesia. Así lo instituyó Jesucristo, así lo recibió y lo trasmite la Iglesia. Esta fidelidad al Evangelio no excluye su actualización en el hoy de la historia, pero siempre desde una identidad profunda con su verdad original. Un auténtico espíritu creativo no cambia la esencia de las cosas, las recrea conservando lo que es propio. Así veo, y así trato de vivir el sacerdocio de Jesucristo”. 

Por último, monseñor Arancedo invitó a unirse en oración y gratitud por todos los párrocos, al asegurar que "a ellos les hace bien nuestro reconocimiento".

1 comentario:

  1. MI REFLEXION POR EL DIA DEL PARROCO ES QUE ITATI TIENE MUY MALA SUERTE,NO SOLO LE TOCAN INTENDENTES QUE DURAN VEINTE AÑOS Y NO HACEN NADA O LO QUE HACEN ES MALO SINO QUE TIENE TAMBIEN MALISIMOS PARROCOS COMO EL ACTUAL CURA CAMINO,SOBERBIO CAPRICHOSO Y BRUTO Y TODAVIA TENEMOS QUE AGUANTERLE MAS TIEMPO!

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